El futuro de las Socimis en España: ¿Una crisis fiscal o una oportunidad desaprovechada?
( 15-01-2025 )
La Redacción
Las recientes medidas anunciadas por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, para abordar la crisis de la vivienda han puesto en el centro del debate la situación de las Socimis (Sociedades Cotizadas Anónimas de Inversión en el Mercado Inmobiliario) y el impacto que podrían tener en el sector inmobiliario. Estas decisiones, que incluyen cambios fiscales dirigidos a ciertas sociedades, han generado incertidumbre y reacciones divididas entre los principales actores del mercado.
Grandes Socimis: Merlin y Colonial sortean la tormenta
Merlin Properties y Colonial, dos de las mayores Socimis en España, han logrado esquivar las medidas fiscales propuestas por el Ejecutivo. Al centrarse en inversiones no residenciales, estas compañías mantienen su régimen fiscal especial. El mercado ha respondido positivamente: las acciones de Merlin subieron un 4,94%, mientras que Colonial registró un alza del 1,88%. Esto contrasta con la incertidumbre generada en noviembre pasado, cuando una propuesta para eliminar el régimen fiscal especial de las Socimis causó alarma en el sector.
Sin embargo, para Helena Beunza, presidenta de Asval, una asociación que representa a los propietarios de vivienda en alquiler, el problema radica en la falta de consenso entre los actores políticos y privados. Beunza aboga por un proceso de negociación serio y sosegado que refuerce la seguridad jurídica del país.
El efecto sobre las promotoras y los clientes extranjeros
Otro aspecto controvertido es la propuesta de incrementar la carga fiscal hasta el 100% del valor del inmueble para la compra por parte de extranjeros extracomunitarios no residentes. Aunque el impacto directo sobre las grandes promotoras parece limitado—Neinor, por ejemplo, informó que solo el 2% de sus preventas corresponden a este grupo—, el anuncio ha generado un ruido perjudicial para la percepción de España como destino de inversión.
Metrovacesa y Aedas también han minimizado la relevancia de esta medida en sus operaciones, destacando que su mercado principal sigue siendo nacional. No obstante, la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Madrid (Asprima) y la patronal APCE han criticado la falta de soluciones estructurales que incentiven una mayor oferta de vivienda asequible. Xavier Vilajoana, presidente de APCE, subraya que la clave está en agilizar el desarrollo de suelo y garantizar la seguridad jurídica.
Fondos de inversión: los principales afectados
Entre los más perjudicados por los cambios fiscales propuestos se encuentran fondos internacionales como Blackstone, APG, Aware, TPG y Ares. Estas entidades controlan Socimis con una alta exposición al mercado residencial, como Testa, Fidere y Vivenio. En particular, Blackstone, propietario de varias Socimis cotizadas en el BME Growth, podría perder parte de las ventajas fiscales que hacen atractivo este modelo de inversión.
Un debate necesario sobre el modelo de vivienda
Mikel Echavarren, presidente de Colliers España y Portugal, advierte que los constantes cambios normativos están afectando la confianza de los inversores. "El capital que entra en el mercado con una estrategia definida no puede enfrentarse a modificaciones inesperadas en las reglas del juego", señala. Además, plantea dudas sobre cómo se implementarán medidas como el impuesto a extranjeros, ya que podría requerir cambios en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP), una competencia autonómica.
Perspectivas y retos para el futuro
El sector inmobiliario español se enfrenta a un momento decisivo. Si bien las grandes Socimis parecen haber evitado el impacto de las medidas fiscales, las propuestas gubernamentales han puesto de manifiesto las tensiones entre las necesidades de vivienda asequible y la estabilidad del mercado de inversión. Para muchos, el verdadero reto no está en imponer nuevas cargas fiscales, sino en resolver el problema de la escasez de oferta a través de una regulación más ágil y consensuada.
La respuesta del Gobierno y el sector privado será clave para determinar si España puede mantener su atractivo como destino de inversión inmobiliaria mientras aborda la crisis de la vivienda con soluciones sostenibles y efectivas.
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